Lectura quincenal - Octubre 2018

Ha llegado octubre y me gustaría compartir contigo una nueva lectura quincenal. Esta vez te traigo una pequeña muestra de Amorémonos de Soledad Vallet. Este libro es un poemario conformado por 44 poemas de amor (y desamor).

Si eres lector asiduo de este rinconcito, ya sabrás que la poesía es mi género pendiente. No suelo leer muchos poemarios porque me suele costar mucho conectar con este tipo de literatura. Sin embargo, no me rindo y, de cuando en cuando, me atrevo con alguna obra de este tipo. Amorémonos captó mi interés tanto por su título (un curioso juego de palabras entre sustantivo y verbo), como por su portada (esas uñas rojas...). Al buscar su sinopsis, me encontré con que viene uno de los poemas que podrás encontrar entre sus páginas. Leerlo me animó a darle una oportunidad a este libro y ha habido de todo: poemas que me han dejado indiferente, poemas que se me han quedado cortos, otros con los que me he sentido identificada, otros que me han borrado la sonrisa... Y hoy, tras un par de lecturas de todos ellos, vengo a mostrarte los cinco poemas que más me han gustado.

Amorémonos

Soledad Vallet

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TENÍAS QUE CRUZARTE EN MI VIDA

Tenías que cruzarte en mi vida
para devolverme la sonrisa,
el sonrojo que asoma en las mejillas
y la pícara mirada enamorada.
Tenías que cruzarte en mi vida
para que el deseo me esclavizara,
la sensualidad de tu cuerpo me arrollara
y el placer, al grito, me liberara.
Tenías que cruzarte en mi vida
aunque en ella no te quedaras.


SILENCIO

Gozoso tormento
amarte en silencio
sin besos los labios,
sin caricias el cuerpo
y de este regocijado dolor,
sin voz el llanto,
con la esperanza paseando
al borde del precipicio.
Gozoso tormento
amarte en silencio
en el refugio de los versos
que son mi sustento.


TAZA DE CHOCOLATE

Eres como una taza de chocolate
caliente, caliente
en un día de invierno
frío, frío.

El aroma y el sabor
seducen mi cuerpo,
reconfortante y placentero
me abraza por dentro.

Le digo adiós al frío,
a la tristeza y al dolor.
Le doy la bienvenida al calor,
a la alegría y al amor.

Dulce, apetitoso,
nutritivo y delicioso.
Un placer divino
para los sentidos.

Eres como una taza de chocolate
caliente, caliente
que deseo tomar
siempre, siempre.


ATRÉVETE TÚ

Al escribir puedo expresar y sentir
lo que contigo no me atrevo a vivir.
¡Qué valiente cuando escribo!
¡Qué cobarde cuando vivo!

Atrévete tú y despiértame,
quítame la tinta y el papel.
Atrévete tú y enséñame
a escribir, con mis manos, sobre tu piel.


ADIÓS

En las sombras del anochecer
se deja ver la decepción,
ahonda con fuerza el dolor
y tu orgullo se mantiene firme.
Unos pasos nos separan,
enorme muro de silencio,
distante, impasible, frío.
Unos pasos se alejan,
enorme muro de silencio,
dicen adiós sin remedio.

! Para consultar la ficha de este libro, pincha aquí.

¿Y tú? ¿Sueles leer poesía?
¿Qué te ha parecido esta lectura quincenal?

¿Te animarías a seguir leyendo este poemario habiendo leído estas líneas?